Un podcast-tebeo
No es muy loco que un podcast recuerde al teatro. Lo insólito es que un podcast suene a tebeo.
—¡¿Quééé?! ¿Un podcast-tebeo? ¡Rayos y truenos!
Así suena la trilogía (los tres primeros capítulos) con la que empieza la tercera temporada de La Historia Es Ayer. Pero lo mejor es que…, ¡ñah!, no es exactamente un cómic. Es un podcast-tebeo.
Porque no ilustra un cómic de Marvel rollo superhéroes gloriosos y poderosos.
¡Ilustra un tebeo tipo Mortadelo y Filemón!
El cutrismo ilustrado de Ibáñez, ¡que es mucho mejor!
El tebeo es el envoltorio para entregar la información. Pero dentro hay un caramelo, que es desentrañar y comprender nuestro mundo desde los ojos de la arqueología contemporánea.
Y este primer capítulo es también una explicación de por qué ha pasado tanto tiempo entre la publicación de la 2ª y la 3ª temporada. Así lo explica Marcus H:
—No ha sido un año fácil. Es como si los objetos que ayudamos a desenterrar se hubiesen puesto de acuerdo para sabotear la nueva temporada de La Historia es Ayer.
¡Caramba! ¿Qué habrá podido ser? 🤔
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Una presentación futurista
La rareza de esta serie no es solo que, en su 1ª temporada, empezara como un documental (o «narrativo de no ficción», en lenguaje burocrático) y en la 3ª se haya convertido en un tebeo.
Quizá lo más alucinante es que lo hayamos presentado a contracorriente de los tiempos (¡teletransportándonos al futuro y al pasado!).
En estos años grasientos de ¡cuánto más, mejor!, ¡cuánto más te exhibas, más mejor!, ¡cuánto más destruyas la privacidad, mucho más mejor para Zuckerberg!, presentamos la nueva temporada en un lugar privado, donde no se pueden hacer fotos y donde no hay escenarios ni butacas para el público porque es, realmente, un club.
Un club donde fuimos a escuchar y no a echar putifotos.
Y la sorpresa fue descubrir que cuando uno se pone a escuchar de verdad, y no a ¡clic, clic, parriba, pa redes!, esa escucha se convierte en una especie de viaje sonoro colectivo. Incluso en una meditación guiada por objetos cotidianos, como una moneda, un anillo o una pipa.
Así fue la presentación para los socios del Club El Extraordinario.
Y si aún no eres socio, ojalá te unas pronto.

Salud y escuchas sin ¡clic!,
Mar